La isla de Milos

Aunque relativamente pequeña, con poco más de 150 kilómetros cuadrados, Milos presume de una extensa costa de más de 120 kilómetros.

Su escarpado paisaje está salpicado de maravillas geológicas, desde impresionantes rocas volcánicas hasta cuevas y fuentes termales, lo que la convierte en un paraíso para geólogos, excursionistas y amantes de la naturaleza.

Milos también es famosa por sus encantadores pueblos, donde las casas encaladas y las iglesias de cúpulas azules se mezclan armoniosamente con tabernas tradicionales y pintorescos cafés.

La animada escena cultural de la isla ofrece una gran variedad de eventos, desde festivales de música y exposiciones de arte hasta celebraciones religiosas, en las que tanto lugareños como visitantes se unen para abrazar el espíritu de comunidad.

Tanto si busca relajarse en playas tranquilas, explorar ruinas antiguas o saborear las delicias culinarias de la isla, Milos tiene algo para todos los gustos.

Así que prepárese para embarcarse en un viaje inolvidable por esta mágica parte de Grecia.